Si bien, en una encuesta telefónica automatizada se pueden hacer como máximo ocho preguntas, las ventajas son muy altas:
La entrevista es corta y clara, por lo que el entrevistado no se cansa al responder.
Gracias al anonimato que siente el entrevistado por no interactuar con una operadora, su respuesta es más honesta y el entrevistado es más participativo, recordemos que el anonimato es un factor primordial ya que cada voto es secreto.
Al no interactuar con operadoras, el entrevistado reconoce que es una voz grabada lo que escucha, el nivel de rechazo es menor a comparación de una encuesta realizada por callcenter.
No hay errores humanos, gracias a que se registra de forma directa la respuesta.
El costo es muy bajo; puedes tener un tracking periódico por un tiempo determinado.
La entrega es muy rápida, en menos de 72 horas se engrega el servicio.